Por su ubicación, que conecta el sur del Continente Americano con Estados Unidos, México es un país de tránsito de extranjeros, pero también se ha convertido en lugar de residencia para cientos de miles que decidieron hacer una vida en nuestro país, para lo cual han puesto sus papeles en regla.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Migración (INM), correspondientes al año pasado, más de 605 mil personas de 199 nacionalidades diferentes cuentan con algún tipo de permiso para residir temporal o permanentemente en México, ya sea por razones de trabajo, estudio, humanitarias o por haber formado una familia con un mexicano o mexicana, entre otras.
La información, obtenida vía la ley de transparencia, revela que la mayoría de los extranjeros que viven formalmente en nuestro país provienen de Estados Unidos, Venezuela, Honduras, Cuba, Colombia, El Salvador, Guatemala, China, España, Argentina, Canadá, Brasil, Haití, Japón, Corea, Francia, Italia, Alemania, Perú y Chile.
Sin embargo, también los hay de la India, Ucrania, Nigeria, Turquía, Paquistán, Egipto, Serbia, Irak, Nepal y hasta una veintena de ciudadanos de Corea del Norte.
Aunque estas personas se han dispersado a lo largo y ancho del territorio nacional, existen ciertos lugares donde se aglutina la mayoría, formando así comunidades de distintas nacionalidades.
Los estadounidenses, por ejemplo, se concentran principalmente en Chapala y Puerto Vallarta, Jalisco; Los Cabos, BCS; San Miguel de Allende, Guanajuato; y Puerto Peñasco, en Sonora. Los canadienses comparten su gusto por Chapala, Los Cabos y Puerto Vallarta, aunque otros grupos han optado por vivir en Bahía de Banderas, Nayarit, y Mazatlán, Sinaloa.
De los chinos es bien conocida su presencia histórica en el norte de Baja California, sin embargo también viven en la capital del país. El INM tiene registrados a más chinos viviendo legalmente en la alcaldía Cuauhtémoc de la Ciudad de México que en Mexicali, donde se localiza el famoso barrio de La Chinesca.
La mayoría de los centroamericanos que tienen permiso para vivir en territorio nacional prefiere el sureste como lugar de residencia, muy cercano a sus países natales. Viven principalmente en los municipios de Tapachula y Suchiate, en Chiapas. Otros más habitan en Tijuana, probablemente al no poder cruzar hacia Estados Unidos.
Pero también hay comunidades de hondureños en Saltillo, Coahuila, y en la alcaldía Iztacalco de la Ciudad de México, de salvadoreños en Guadalajara y de guatemaltecos en Cancún.
Hablando de Cancún, personas de diferentes nacionalidades tienen como principal destino este sitio turístico ubicado en Quintana Roo. Es el caso de los cubanos, los rusos y los ucranianos. En el lugar también hay importante presencia de españoles, argentinos e italianos.
Otras regiones se han convertido en imán para los extranjeros debido a las empresas que se asientan en esos lugares. Por ejemplo, la mayoría de los alemanes que viven en México se localizan en San Andrés Cholula, Puebla, a una hora en auto de donde se ubica la planta de la empresa alemana Audi.
Algo similar sucede con la comunidad de coreanos viviendo en Apodaca y Monterrey, en Nuevo León, a media hora de la planta donde se fabrican los autos de Kia; la de japoneses en Aguascalientes, donde se localiza la planta de Nissan, y también en el estado de Guanajuato, donde se instalaron Honda, Mazda y Toyota.
Otro caso es el de la comunidad de personas provenientes de la India, que se concentra principalmente en Zapopan y Guadalajara, Jalisco, atraídos por la industria de alta tecnología que se desarrolla en esa región.
De acuerdo con los datos, 55 por ciento de los extranjeros con permiso para vivir en México son hombres y 45 por ciento son mujeres. En cuanto a edad, la mitad se encuentra en el rango de 25 a 44 años, en tanto que una quinta parte son adultos mayores de 55 años.
Asimismo, 63 por ciento cuenta con tarjeta de residencia permanente, 25 por ciento con tarjeta de residencia temporal, 10 por ciento con tarjeta de visitante por razones humanitaria tres por ciento con tarjeta de estudiante y dos por ciento con tarjeta de estudiante. También hay 34 personas que cuentan con una tarjeta de visitante con fines de adopción.